
Todos los años, las organizaciones sin ánimo de lucro se preparan para el día de las donaciones. Llega el 1 de abril, llegan los donativos y, a medianoche, o lo celebras o te cuestionas tus decisiones vitales.
¿Y después?
Con demasiada frecuencia, la respuesta es nada. La campaña termina, se publica el mensaje de agradecimiento y todo el mundo sigue adelante hasta el año que viene. Y eso es un problema. Porque aunque el día del donante es importante, la verdadera oportunidad es lo que viene después.
Algunas organizaciones sin ánimo de lucro tratan el día de la donación como una aventura de una noche. Rápido, llamativo, emocionante... y luego desaparece. Pero los donantes no piensan así. Dan porque creen en ti. Quieren ver qué pasa después.
Si les dejas fantasmas, rompes la confianza. Y una vez que la confianza desaparece, también lo hacen las futuras donaciones.
Las relaciones con donantes funcionan como cualquier relación. No te declaras en la primera cita. Hay que ser constante, cumplir las promesas y hacer saber a los demás que son importantes.
Por eso, una campaña del Día del Donante bien gestionada es algo más que alcanzar el objetivo económico. Se trata de crear hábitos y activos que utilizarás durante todo el año:
Piénsalo de esta manera: el Día de Donación es como un campo de entrenamiento. Se afinan los mensajes, se pone a prueba el alcance y se consigue el compromiso de los donantes. Luego utilizas esas mismas habilidades y recursos para impulsar la captación de fondos el resto del año.
En lugar de una lucha puntual, se convierte en parte de una estrategia más amplia. Así es como se construye la confianza de los donantes a largo plazo, y los ingresos a largo plazo.
Nuestros paquetes de campaña se diseñan teniendo esto en cuenta. Sí, le preparamos para ese gran día. Pero también nos aseguramos de que lo que te damos dure:
Porque ninguna organización sin ánimo de lucro debería invertir meses de energía en un día para que todo desaparezca el 2 de abril.
Ese día de dar es importante. Pero no lo es todo. Lo inteligente es utilizarlo como trampolín, no como meta.
Si estás preparado para dejar de tratar el 1 de abril como una aventura de una noche y empezar a crear una confianza duradera entre los donantes, hablemos.
Las plazas para nuestros paquetes de campaña son limitadas. Los contratos se cierran el 1 de noviembre de 2025. Después, las puertas se cierran hasta el año que viene.