Enel corazón de toda democracia próspera reside el poder de una comunicación clara y abierta entre el gobierno y su pueblo. Hoy en día, cuando la población hispanohablante de Estados Unidos supera los 42,5 millones, el imperativo de una comunicación inclusiva nunca ha sido más pronunciado. Para los organismos gubernamentales, este cambio demográfico representa tanto un reto como una oportunidad para fomentar una comunidad verdaderamente conectada.
Los ciudadanos hispanohablantesforman parte integrante del tejido social y contribuyen a la economía, la cultura y el dinamismo de la nación. Sin embargo, a menudo reciben información y servicios vitales únicamente en inglés. Esta barrera puede conducir a la falta de compromiso, a malentendidos y a una menor confianza en las instituciones públicas. La necesidad de una información precisa, oportuna y culturalmente relevante no es sólo una cortesía, sino un elemento crucial de una gobernanza eficaz.
Entreen el diseño gráfico bilingüe: el puente entre los gobiernos y la diversa población a la que sirven. El diseño bilingüe va más allá de la mera traducción. Implica la creación de contenidos visuales que transmitan mensajes eficaces a través de las fronteras culturales. Piense en los sistemas de radiodifusión de emergencia, los avisos de salud pública, los folletos de información al votante, etc.: todos ellos requieren un enfoque sensible que tenga en cuenta el idioma tanto como el impacto visual.
Paralos gobiernos que deseen repetir este éxito, he aquí algunas buenas prácticas:
El usode plataformas tecnológicas como DobleImpact puede agilizar considerablemente la creación de contenidos bilingües. Los organismos públicos pueden desplegar rápidamente proyectos de diseño dirigidos tanto a angloparlantes como a hispanohablantes, garantizando la coherencia de la marca y los mensajes y reduciendo al mismo tiempo los plazos de entrega y los costes.
Cuandolos gobiernos adoptan el diseño gráfico bilingüe, no se limitan a cumplir las leyes de acceso lingüístico, sino que invierten activamente en el bienestar y la participación de un segmento significativo de su electorado. El resultado es una comunidad más fuerte e integradora en la que se oyen todas las voces y se ve a todas las personas.